Hangover

Me acabo de despertar después de una de esas fiestas del Sokos de las que tanto había oído hablar pero a las q nunca había podido ir por unas razones u otras (intentar ir sin entrada es algo que no recomiendo a nadie; aunque parece que ayer las consecuencias no fueron tan malas para los que no llevaban entrada: no tuvieron que esperar mucho en la calle).

La verdad es que la fiesta fue muy buena. Empezamos con una pre-party en casa de Esther y Clara con el Spanish Ghetto de Latolankatu en la que cada uno se bebió un arsenal de cervezas/calimocho o lo que se terciase, acabando bastante perjudicados antes de ir al Sokos.

Cuando terminamos cogimos la caravana de las bicis y allá que nos fuimos. Cuando entramos estaba ya bastante llenito y en general todo el mundo se lo pasó bien durante la noche. Yo me dediqué a ronear a una alemana que parecía un poco interesada y poco más pasó (la sombra de la armenia estaba por allí y preferí contenerme….).

A la salida cuando cerraron guerra de bolas de nieve entre los erasmus más tropicales que no habían visto tanta nieve junta en toda su vida.

Tras darnos cuenta de que a Bjarne le habían mangado ese icono con ruedas que es la Golden Rocket fuimos a una after-party en casa de Carston hasta las 7 de la mañana (mas ir de Suvikatu a Latolankatu, hablando por telefono en la bici y casi cayéndome por la cantidad de nieve que había ), con la mayor bizarrada de la historia con El Cícrulo. Se nos notaba a todos un poco pasados.

Esta mañana, como digo, me levanté a las 3 y ya casi era de noche otra vez. Cuando entré en la cocina para beber zumo contra la hangover le dije a Wojtek «Good morning» y se rió.

Para no.

Pongo esta foto por que mola. Coño.



Rusia(7)

Fuimos a dejar los abrigos al entresuelo al lado de las taquillas y como creía que no se podían llevar cámaras dejé la mía en el ropero. Como creo que ya he dicho, una de las cosas buenas de Rusia es que no hay que pagar por el ropero nunca. También fuimos al baño conscientes de que a lo mejor dentro no era tan fácil encontrar uno y nos encontramos con los peores baños que he tenido el gusto de pisar. A parte del olor nada agradable, las paredes tenían rastros marrones, como si agua marrón hubiera bajado desde el techo hasta hacer una pequeña catarata y se hubiera quedado la marca. Marrón y ancho arriba y poco a poco más pequeño y más marrón hasta el suelo. Salimos de allí bastante contentos con haber pisado esos baños.

Dentro del Hermitage al principio me fuí con Marta y con Raquel, y la verdad es que como era tan grande el museo tampoco nos encontrábamos con tanta gente por los pasillos.
Pasamos directamente de la planta de abajo, la de las esculturas, y nos fuimos a la segunda (parece que en el resto del mundo menos en España la segunda planta es… la primera y la primera es el bajo). Y empezamos por la colección renacentista.
Tampoco íbamos siguiendo rumbo alguno, pero como el museo era tan enorme no nos encontramos dos veces con las mimsas cosas.

Una de las piezas centrales del museo son los DaVinci que hay por ahí, pero también tenían una decente colección española y una bastante impresionante italiana. Después de un rato perdí a Marta y Raquel y me quedé dando vueltas por el museo hasta el meeting en el autobús, a las 5, aunque me encontré también por los pasillos a los de Turku y me quedé un rato hablando con ellos. Me dijeron que estuvieron en la tercera planta viendo los Picassos y en la última media hora, en la que estaba cansadísimo después de andar y estar de pie durante cinco horas por el museo.
La verdad es que merece la pena ir a San Petesburgo solamente por el Hermitage. A las cinco salimos todos los que habíamos quedado para ir andando, recogimos las cosas del bus y allá que nos pusimos en marcha.

El Hermitage está relativamente cerca de los Campos de Marte, de modo que lo primero que hicmos al salir los que nos quedamos para andar, Joensuu team (Florian, Thomas, Marta, Raquel y yo) con Diego e Ibai de Turku; de modo que nos fuimos a ver la llama eterna.

Bruja!

De allí fuimos a la Catedral de la Sangre Derramada de nuevo, y que estábamos cerca, y desde allí, mapa en mano y cruzándonos con más españoles haciendo exactams ente lo mismo que nosotros . Nos quedamos dando una vuelta a los puestos otra vez, para ver cosillas y mirar precios y desde allí nos fuimos a la calle principal.

Andamos para arriba la calle principal, esta vez sin Thomas, que tenía prisa porque había una de esas visitas guiadas que organizaba la agencia de viajes, un tour en barco por los canales de San Petesburgo.

Se me olvidó comentar que el día anterior por la noche Thomas se fué con otro grupo de fiesta y, a la hora de irse, los demás se fueron mientras él estaba en el baño. Cual sería su sorpresa cuando se encontró solo en el bar y se tuvo que ir.

El pobre Thomas no sabía donde estaba el hotel porque no tenía mapa, de modo que se decidió a preguntar a unos policías que estaban por ahí de patrulla. Los amables policías le dijeron que se desnudara de cintura para arriba, le contaron el dinero, se lo devolvieron y le dijeron que se marchase sin decirle dónde quedaba el Hotel Sovetskaya. El pobre Thomas, claro, medio borracho y en medio de San Petesburgo sin saber a dónde ir les preguntó a otro par de guardias, que por no ser menos que sus compañeros le dijeron que se desnudara, le contaron el dinero y esta vez sí que se lo quedaron. 2000 rublos que al cambio son unas 10000 pesetas (1 rublo es más o menos un duro) o 60 euros.
Lo que no sé es como llegó al final al hotel.

Nosotros, como decía, seguimos andando por la calle principal hasta que empezó a hacerse lo suficientemente de noche, con lo que nos dirigimos al hotel para descansar un rato y pensar en lo que haríamos por la noche.
En el camino, pasamos por delante de los omnipresentes McDonalds, pero con un aspecto un poco diferente.



Yliopisto

Léase Úliopisto.

Esta es una tontería aburrida y sin gracia, pero resulta que mirando las fotos que puse en el último post, entre ellas hay una del cartelito de Joensuun Yliopisto nevado, con la que, pasando el ratón por encima (con Internet Explorer, o bien clicando en propiedades en la foto), podemos ver el cartelito pone YYYYYLiopisto!!! (más o menos Y y !).

La historia del grito de Yliopisto es otra historia, y debería ser contada en otro post. Pero resulta que con la tontería puse Yliopisto en el google para ver si aparecía mi foto (muy optimista era yo: google no se da cuenta de que existen nuevos contenidos de un dia para otro; al menos en esta página), pero lo que en realidad encontré fue esto:

YYYYYLiopisto!!!

Sí, aquí la edición de Los Sims Universidad es (lógicamente, por otra parte) The Sims Yliopisto. Y como me entró la curiosidad me metí a ver la página que había puesto la foto, para encontrarme un set de fotos del juego que tienen un curioso paralelismo con mi vida en Joensuun Yliopisto.

Yo también lo hago
Miguel y yo en la sauna de los sábados nos salimos (casi) en bolas a restregarnos la nieve virgen por el cuerpo. Más o menos como estos tipos pero con nieve. La pregunta es de los dos quién se parece más al tipo del pelo largo y quién al otro. Con tanto cuadrito no sabría decir.

Dándole duro
Esto lo hago yo y también Antonio casi todos los días en el gimnasio gratis de la uni. Yo tengo la decencia de no vestirme así, al menos.

Rockeando
Rockers
Igualmente, cada pocos días me voy al edificio Educa a tocar la batería, y si se apunta Bjarne con la guitarra y alguno más con bajo y teclado, somos casi la misma mierda.

En realidad los papeles estan cambiados en la foto. Pero valdrá para nuestro ejemplo...
Ya sabéis lo que pasa ahora.
Sí, es cierto. En el Erasmus se pilla. Y mucho.
Lo curioso es que en las dos fotos es el mismo tío, lo que confirma dos reglas básicas: en el Erasmus las novias en otro país no cuentan y que quien se echa novia aquí pierde oportunidades.

La resi es así.
Fútbol y cerveza. No os sorprendáis
Jugar al fuchy es de gays.
Típicos días en la residencia. Léase con nieve y sin sol.
Y con seis horas de luz.

El Kerubi Kuppila. O el Kruunu. O algo.
Esos sillones están en el Café Kruunu. Y sino cualquier cafeteria molonga (menos de las que diríais)

Fies
Esto es falso. En nuestras fiestas no hay quien respire de la gente que hay. Por lo de las togas y las gafas de sol… ¡demonios! es cierto.

Carelian Kirjasto
En la biblioteca del Carelia este rollo es constante.



El tiempo está loco: ahora una nevada copiosa

Después de que la semana pasada tuviéramos nieve; esta que lloviera y se quitara la nieve; después de que dejara de llover y se secara el suelo, esta mañana hemos amanecido nevando y aún no ha dejado.

Algunas fotos de Joensuu nevado:

Así amanecí hoy
Joensuu esta mañana, después de que dejase de llover antes de ayer y ayer estuviera todo seco.

Mi nuevo peinado y Joensuu
Enfrente del portal

Angelitos...
Si no haces un ángel en el suelo es que no eres persona.

Long way home
Da pereza irse al centro desde Rantakyllä.

Monumento a los caídos
Así de bonita está la estatua después de una nevada.

Después de unas horas nevando esto es lo que pasa.
Miguel y yo estuvimos estudiando unas horas en la uni y a la salida así estaban las bicis

YYYYYYYYYYLiopisto!

Familia de Muñecos.
Cuando íbamos a la uni la familia entera los estaba construyendo. Así de majo los dejaron