Helsinki quita sus cabinas de teléfonos

Hace tiempo comenté lo difícil que era encontrar una cabina de teléfonos en todo Joensuu, y ahora va a ser imposible hacerlo en Helsinki.

De las 900 cabinas disponibles por las calles de la ciudad en 1990, y aunque hace un año el número ya se había reducido a 200, están desapareciendo rápidamente. Las últimas cambinas (los teléfonos los habían quitado hace tiempo) de la compañía de teléfonos Elisa se están quitando a día de hoy con un camión-plataforma en los distritos de Kallio y Alppila. Otras compañías, como Telia-Sonera, las quitaron ya el año pasado.

Aún quedará alguna cabina en Helsinki, pero ya dentro de edificios como hospitales (y espero que en el aeropuerto), por si alguien tiene que llamar en una urgencia, pero aun así admiten que es más sencillo pedir el móvil a alguien si hay alguna. En total, el año pasado se hicieron medio millón de llamadas desde teléfonos públicos, en comparación con los siete millones que se hicieron desde móviles.

A mí con estas cosas me invade el romanticismo, y es que las cabinas de teléfonos visten una ciudad. Bien es cierto que no son las de Londres, un símbolo de la ciudad, pero de vez en cuando salvan y desde ellas se puede usar España directo, aunque bien es cierto que eso se hace ahora mejor y más barato desde Skype. ¿Decisión comercial lógica? Pues sí, pero da pena.

P.D. Y ya que estamos, reivindico que la mejor película española es, para mí, la cabina.

Adios a las cabinas de teléfono en Helsinki
Nótese la botella vacía en la cabina. Algo finlandés sin duda.Fuente.