Mis primeros días de vuelta en Joensuu

Bueno, ya iba siendo hora de hacer un post sobre qué tal han sido estos días en Joensuu.

Después del largo viaje en avión (el aeropuerto de Frankfurt siempre es un caos y no recomiendo hacer escala ahí si es posible) pude hacer el truco de la tarjeta de estudiante: enseñé al conductor la del año pasado y me hizo el descuento como si nada pasase.

Por la mañana estaban esperándome en la estación de buses y nos pasamos el día juntos y de tiendas. También fui a alquilar una bici y me encontré con la que fue mía en la puerta de los borrachos. Iba a alquilarla pero tenía la rueda de alante pinchada. Alquilé lo que en España sería una bici normal y se me pinchó más tarde. A día de hoy está en los borrachos reparándose.

Joensuu está casi tal como la recuerdo. A día de hoy nublada y lluviosa. Apenas se ha visto el sol entre dos nubes en todo el tiempo que llevo aquí. Los edificios a medio levantar están terminados (el nuevo edificio de la universidad al lado del Aurora, por ejemplo) y por lo demás igual. Estamos en pleno otoño con lo que pueden verse paisajes coloridos por toda la ciudad. Aún no he ido a Latolankatu para ver cómo anda, pero pronto lo haré.

Ya he estado un rato con algunos Erasmus nuevos, en concreto con Alex al que ya conocía de alcalá, las sucesoras de María la extremeña y otra chica catalana amiga suya. Y como corresponde a estar al principio, están mucho de fiesta.

Tuve también la reunión con mi ex-director de proyecto y ya que soy un «tránsfuga» porque sigo con el proyecto en la universidad de Alcalá, le propuse una solución con la que parece que estamos todos contentos. Menos mal.

Ayer fui a comer al Carelia y resulta que a las tarjetas de estudiante, aparte de cambiarles el año en la pegatina, también cambia el color de su pegatina, con lo que la mía canta mucho como que no es de este año. Oculté la pegatina debajo de una servilleta y la señora del Carelia (la clásica) no miró ni dijo nada. Por cierto, el Carelia ha cambiado la distribución del lugar donde se sirven las comidas y se cogen los cubiertos y demás.

Temperaturas

Según parece, esta semana será la primera con temperaturas bajo cero, y esperemos que nieve un poco, que no quiero irme sin ver la nieve.

Ahh, Joensuu, Joensuu…



Vino español en Finlandia

Qué raro, dos post de bebidas seguidos. Y es que venir a Finlandia no le deja a uno indiferente sobre este tema.

Ayer, ojeando un periódico me encontré con este anuncio

Vino español!
Lo que pone en letras rojas abajo a la izquierda es: Vamos Alko! 4,80 €

Y es que por aquí suelen intentar colar vinos finlandeses por españoles simplemente poniendo una etiqueta estereotipada. En el caso del vino El Tiempo (dentro de poco espero que toque un post sobre el Don Sancho, y es que esa etiqueta es mítica) una muleta a un lado del nombre y un toro embistiendo al otro lado.

Un domingo cualquiera en España, vamos.



La probamos: la Lordi Cola

Lordi Cola!

Rápidamente me tuve que hacer con una: la Lordi Cola tenía su propio estante en el supermercado (city Market) y hasta allí me vi atraido.

La Lordi cola de litro y medio costaba 2 euros con 29 céntimos, caro si lo miras desde España pero como el Sprite o la CocaCola si la miras desde Finlandia. La diferencia de precio con la de medio litro (1,49 euros) hizo que me cogiese la botella grande para la prueba definitiva de la Lordi Cola.

Lo primero que me sorprendió al sacar la botella de la bolsa una vez comprada, es que la Lordi Cola es Light. Lo de que la bebida sea de cola es comprensible. La cola es negra y lordi es un señor oscuro, pero es cuanto menos irónico que ese monstruo del infierno tenga una bebida light.

Lordi Cola... light
Por qué, Lordi. Por qué…

Una vez echada en el vaso sorprende que no tenga apenas burbujas, otra cosa que esperaba. Tanto la Pepsi (aunque esto no puedo confirmarlo: llevo años sin tomar una Pepsi) como la CocaCola tienen muchas burbujas en su versión de botella familiar, pero Lordi casi ninguna.
No la condenemos todavía. En cuanto al color, este es normal. Si ponemos el vaso a trasluz transparenta tanto como cualquier bebida de cola.

Lordi Cola

A la hora del paladeo es cuando la Lordi Cola pierde por goleada ante sus rivales, y es que su sabor deja un regusto artificial. La Lordi Cola se hace mezclando polvos con agua ligeramente carbonatada y listo. Una pena.

De todas maneras se deja beber, y supongo que mezclar con vino y/u otras bebidas alcohólicas, con lo que digo yo que daré cuenta de la botella en poco tiempo.

Hay que escanciarla con cuidado

Como nota final, llevaba un año sin sangrarme la nariz, ayer probé la Lordi Cola y esta mañana me sangraba. Coincidencia?

Entradas relacionadas:



Salgo para Joensuu

Joensuu

Ya he hecho la revisión de la ropa para llevar a Finlandia, ahora toca ir.

Espero hacer estos días: